Primero… ¡aclaremos algo!
En términos de alimentación “caloría” es la
cantidad de energía calorífica necesaria para
elevar la temperatura de un gramo de agua pura, desde
14,5 °C a 15,5 °C.
Cada alimento que ingerimos libera una cantidad determinada de calorías,
estas calorías son el equivalente del calor que desprenden estos alimentos
ingeridos al ser metabolizados por nuestro organismo para cumplir determinadas
funciones, ó sea que para utilizar y aprovechar las calorías ingeridas primero
debemos esperar que nuestro cuerpo las metabolice, pero para que esto suceda
tenemos que movernos o provocar algún estimulo que favorezca al cuerpo la
utilización de estos alimentos ingeridos, por lo tanto para sentir calor no es
suficiente con aportar alimentos calóricos, sino que a demás debemos movernos o
realizar alguna actividad para que el cuerpo utilice los alimentos y se
desprendan las calorías, de no hacerlo el cuerpo acumulará en su tejido adiposo las calorías que deberían provenir de los alimentos con grasa. Entonces, si
comemos alimentos en exceso y más aun si son alimentos grasos y no nos movemos lo único que lograremos es acumular
grasa y engordar, sin percibir demasiado calor en nuestro organismo, llegamos
así a la conclusión de que muy poco tiene que ver consumir alimentos “calóricos”
con favorecer a nuestra sensación térmica, por lo tanto, si no nos movemos el
calor que podemos obtener de un alimento va a ser únicamente el que trasmita un
alimento de acuerdo a la temperatura del mismo y no va a estar tan relacionado
a la cantidad de calorías que este aporte, por ejemplo un helado es un alimento
que tiene muchísimas calorías, pero al estar frió, no nos va a trasmitir
demasiado calor, en cambio, una sopa de vegetales no aporta demasiadas calorías
pero si se consume caliente nos trasmite muchísimo calor.
Lo fundamental no es consumir
alimentos denominados “calóricos” sino consumir la cantidad de alimentos
que aporten las calorías precisas que nuestro organismo necesite diariamente y
mantenernos activos.
Por otro lado, para no sentir
frío, es preciso abrigarse, mantener en el hogar una temperatura ambiental
agradable y no comer en exceso esperando que la comida apalee el frío que
adquirimos por no tomar los recaudos más básicos y fundamentales.
Ahora que entendemos un poco mejor
que no sirve comer en exceso e hibernar como hacen los osos, le dejamos una
serie de consejos para controlar el peso en invierno!
- Puede disponer de alimentos frescos como ensaladas y frutas, la
excusa de no comprar vegetales que se consumen crudos porque hace frío, dejó de
tener vigencia cuando se inventó la calefacción, si la temperatura del hogar es
la adecuada podemos consumir ensaladas como hacemos en verano, de lo contrario
recurriremos a los vegetales cocidos, por ejemplo: Puede remplazar las ensaladas por panachés de verdura; las
frutas frescas por compotas, puede incorporar
legumbres, como soja, lentejas, porotos y garbanzos.
Los vegetales también pueden consumirse en
caldos o sopas, variando sus preparaciones, si las sopas serán tomadas como
plato único, las mismas pueden ser espesadas, licuando los vegetales en el
mismo caldo o con el agregado de avena, salvado de avena, arroz o fideos y
claras de huevo, trate de no agregar carnes rojas, ni siquiera magras, las
partículas de grasa al calentarse pasaran al líquido, si desea agregar carne la
mejor opción es utilizar pechuga de pollo o pavo, sin piel.
Otra opción si no se dispone de tiempo es
utilizar caldos o sopas instantáneos light, que si bien no tienen las mismas
propiedades de una sopa o caldo natural, puede ayudar al cuerpo a mantener su
temperatura aportándole muy pocas calorías, “tenga en cuenta que la mayoría
de las opciones comerciales tienen mucho sodio y conservantes”.
- Si dispone de horno en el interior de su
casa, es la época especial para sacar el mayor provecho del mismo, se puede
preparar infinidad de exquisitas comidas
saludables y además favoreceremos a mantener un ambiente cálido en nuestro
hogar.
- Para
apaciguar la necesidad de mantener calor y evitar la conducta adquirida de
querer comer más en época invernal, beba líquidos calientes bajos en calorías,
por ejemplo infusiones calientes como té en todas sus variedades, café, mate cocido,
etc. Puede agregar edulcorante en lugar de azúcar o Miel para no aportar más
calorías, para aquellas personas que no confían en los edulcorantes
artificiales existe un edulcorante natural llamado “Stevia”, proveniente de un
arbusto originario de Paraguay y Brasil.
- Procure
no saltearse las comidas principales y evite el picoteo entre comidas,
establezca 5 comidas básicas y trate de respetarlas en horario.
¡Sin organización no
podrá controlar lo que come! 3OIIZZZ7
-
Asegúrese que el tamaño de su porción sea adecuado (ni mucho ni poco,
investigue o busque un Lic. en Nutrición que pueda explicarle cuánto es
suficiente para usted).
- Evite
alimentos y preparaciones ricas en grasa o azúcares, como así también el
agregado de estos, como dijimos antes no le aportarán el calor que usted cree y
facilitarán el aumento de peso. Para Saborizar o condimentar, puede utilizar
especias picantes, le brindarán una sensación de calor sin aportar calorías
extras, “evite los picantes si tiene patologías o problemas intestinales”.
- Controlar su peso cada
15 días puede ser adecuado para no registrar aumentos indeseados, la ropa
también es un indicador del aumento de peso, “recuerde que la ropa no se
achica durante el invierno, si no que usted es quien se agranda”.
- No abandone la práctica
deportiva o actividad física regular, “para aprovechar mejor las calorías
ingeridas debemos movernos”, mientras más quietos estemos más frío
sentiremos, opte por actividades que pueden hacerse en un ambiente cálido o
templado o bien abríguese y elija horarios específicos para hacer actividad al
aire libre.
TU NUTRICIONISTA "UNA ALIMENTACIÓN SANA Y EFECTIVA PARA TODOS"
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